Beneficios de la suplementación con ácidos grasos omega 3

Las propiedades beneficiosas de una dieta rica en ácidos omega 3 se observaron originalmente en los esquimales, quienes, aunque casi no comen verduras y frutas, tienen corazones fuertes y sanos, no sufren de alergias ni cáncer. ¿Es la dieta rica en ácidos grasos omega 3 también beneficiosa para la sociedad occidental?

Los ácidos grasos omega 3 son ácidos grasos esenciales e insaturados: son las llamadas «grasas buenas» que el cuerpo no puede producir y, por lo tanto, debemos proporcionarlas regularmente en los alimentos. El ácido graso insaturado esencial más valioso es el ácido alfalinolénico, que el cuerpo humano transforma en DHA y EPA. El DHA es el bloque de construcción principal del cerebro y todo el sistema nervioso central y la retina del ojo. Las deficiencias de DHA pueden causar trastornos cerebrales y problemas oculares. El ácido EPA es responsable del buen funcionamiento del corazón.

¿Cómo se dosifican los ácidos grasos omega 3?

• Los ácidos DHA apoyan el funcionamiento normal del cerebro y los ojos en adultos. En la Unión Europea, la dosis diaria recomendada para cumplir con los requisitos del organismo para 250 mg de DHA. Para comparación, dos cápsulas de OMEGA+++ contienen 280 mg de DHA (una cápsula administra 210 mg de EPA y 140 mg de DHA).
• EPA y DHA también desempeñan un papel importante en el mantenimiento de la función normal del corazón en los adultos. Las necesidades del cuerpo en este caso se determinaron que eran 250 mg de EPA y DHA.
• Los ácidos DHA ayudan a mantener los niveles normales de triglicéridos en adultos. Para mantener el nivel adecuado de triglicéridos, se recomienda consumir 2 gramos de DHA en adultos. Al mismo tiempo, se determinó que la dosis diaria no puede exceder los 5 gramos de EPA y DHA.
• EPA y DHA contribuyen al mantenimiento de la presión arterial normal. En este caso, se recomienda consumir 3 gramos de EPA y DHA durante el día.

Sin embargo, si toma suplementos, recuerde que exceder la dosis recomendada de omega 3 es perjudicial. Los primeros síntomas de una sobredosis son sangrado de la nariz o encías, náuseas, sabor desagradable en la boca. Las dosis más altas de omega 3 se pueden tomar solo en casos justificados y bajo la supervisión de un médico.