El cerebro es un órgano inusual que esconde muchos secretos. El cerebro no solo encuentra y almacena información, sino que también tiene la capacidad de desarrollarse constantemente y crear nuevas conexiones. Lo mismo se aplica a las fibras nerviosas cuya tarea es proporcionar información en ambas direcciones. Con el desarrollo del sistema nervioso, el cerebro aprende a manejar nuevas áreas. ¿Se puede agotar la capacidad del cerebro para regenerarse?
Todos los científicos están de acuerdo en que el área del cerebro llamada hipocampo es la región del sistema nervioso en la que se produce la producción de nuevas células nerviosas durante toda la vida. En esta área del cerebro, se almacena todo el conocimiento y la experiencia del pasado. Además, el hipocampo juega un papel importante al recordar hechos y eventos pasados y la ubicación de objetos o personas. Gracias a este mecanismo, cada persona sana sabe dónde está su hogar. El daño en el hipocampo se asocia con la enfermedad de Alzheimer, que afecta a los ancianos y, a menudo, se manifiesta como una dificultad para reconocer lugares y personas y para recordar eventos recientes, y eventualmente conduce a una discapacidad mental completa.
¿Qué factores perjudican el buen funcionamiento del cerebro?
La investigación científica indica que la insulina desempeña funciones importantes también dentro del cerebro: regula la actividad de las neuronas y participa en la producción de neurotransmisores, por lo que es muy importante en el funcionamiento de la memoria y afecta las funciones cognitivas. Los receptores de insulina se distribuyen en varias regiones del cerebro, incluida la corteza cerebral. En pacientes con enfermedad de Alzheimer, la disfunción de la insulina se detectó a nivel de receptores de insulina.
Algunos científicos creen que el Alzheimer es una variante cerebral de la diabetes y lo llaman diabetes tipo 3.
Las reacciones inflamatorias dentro del cerebro causan la disfunción de las células del cerebro y el mal funcionamiento de las redes neuronales, lo que afecta el flujo de señales nerviosas y hace que el cerebro funcione de manera anormal.
Además, la presencia de radicales libres es dañina para el cerebro porque causa la formación de depósitos y el envejecimiento acelerado del cerebro.
¿Cómo ayudar a la salud del cerebro?
Se ha demostrado que las vitaminas C y E y otros antioxidantes previenen la formación de depósitos, también en el cerebro. Basado en el hecho de que las terminaciones nerviosas en el cerebro tienen la mayor concentración de vitamina C (después de las glándulas suprarrenales), se concluye que esta vitamina es muy importante para el buen funcionamiento del sistema nervioso.
El aceite de linaza mejora la función de la memoria porque contiene ácidos grasos ALA.
El ácido alfa linolénico (ALA) también se encuentra en muchas otras plantas oleaginosas y pescados grasos). Se ha demostrado que la deficiencia de este componente cambia la estructura y altera el funcionamiento de las membranas celulares en el sistema nervioso y en el cerebro. En el caso de una falta a largo plazo de ácidos grasos poliinsaturados en la dieta, la disfunción ocurre en el cerebro. La suplementación con ALA (OMEGA+++) mejora la eficiencia de las funciones cognitivas durante el proceso de envejecimiento natural. Esto se hace regenerando la estructura de las redes nerviosas en el hipocampo y mejorando el flujo de los impulsos nerviosos en el cerebro.